Ante la llegada de una niña o niño, es posible que sus padres tengan cambios emocionales:
Es fundamental reconocer y hablar sobre las
emociones que están experimentando para entenderse y,
juntos, desarrollar estrategias que aborden las necesidades
de cada uno, en favor del bienestar de sus hijos.
Sentirse acompañados uno del otro es muy importante; de esta forma
irán aprendiendo poco a poco, juntos. No existe una receta perfecta
para ser buena madre, padre o cuidador, sin embargo, deben tener
un balance y sentirse bien para desarrollar habilidades como las de la siguiente
lista:
sobre el entorno de niñas y niños y sobre nosotros mismos.